Esther es una preciosa niña que acaba de venir al mundo. Su orgullosisima tía Teresa quería hacerle un regalo original y hacia tiempo que tenía claro que quería una tarta de pañales.
Tenía muy claro que no quería que fuera muy ñoña, que no fuera rosa (gracias Teresa por ser original!!!!) e incluso que buscáramos en vez de un peluche a Chewaka, jajjajaj, lástima que no lo hayamos encontrado porque hubiera sido la caña!
Enhorabuena Teresa, y enhorabuena a los papás y a su hermanita Blanca que ahora tendrá una compañera de juegos.
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Me paraban por la calle mientras la llevaba a casa! Ya te contaré ; )·
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